La ordenanza del Ayuntamiento para regular los caminos rurales está recibiendo reacciones favorables de las plataformas y asociaciones de ecologistas que han luchado durante años por el establecimiento de una ley que recuperara estas vías públicas.
El responsable estatal del área de conservación de Ecologistas en Acción, Joaquín Reina, valoró ayer la ordenanza del Ayuntamiento como "un paso importante hacia delante que ya se veía venir tras una larga andadura, pues hace ya seis años que se hizo el primer borrador". Reina define esta regulación como el resultado de un proceso complicado y uno de los más completos que el Estado ha elaborado para recuperar los caminos públicos municipales. Además de esta herramienta legal, Reina insiste en que es importante el impulso político para que esta ordenanza "no quede en otro borrador más" y se apruebe definitivamente. Reina afirma que es fundamental el apoyo de recursos económicos, jurídicos y legales para la regulación de estos caminos, y añade que "aunque muchos de ellos ya están trazados, no se sabe aún donde discurren, lo que supondrá un trabajo laborioso y costoso que hay que empezar cuanto antes". Reina insiste en que hay que seguir trabajando para que esta regulación sea la definitiva, "debemos contar con todos los recursos técnicos y económicos necesarios para abordar la situación de desamparo y abandono que vive actualmente el campo de Córdoba, una situación que el Ayuntamiento y los colectivos tienen como reto rehabilitar a través de refuerzos económicos y personal técnico cualificado".
Manolo Trujillo, presidente de A Desalambrar, aclaró que su plataforma llevaba "diez años de reclamaciones para regular los caminos y, después de cuatro años de trámites, se ha aprobado por fin la ordenanza". Una medida que, según Trujillo, parece acertada, pero que hay que cuidar para que no se quede en nada, "pues ya se ha regulado el uso de los caminos públicos pero no se ha creado aun el inventario necesario para fijar los pasos de los que los ciudadanos podrán disponer". Trujillo insistió en que "no servirán de nada las normas y prohibiciones que el Ayuntamiento ha establecido en la regulación si estos caminos no se recuperan". Patrick Philpott, miembro de la plataforma, se mostró negativo frente a la ordenanza, "llega muy tarde, nosotros llevamos 6 años luchando por ella y aun el Ayuntamiento no ha procedido físicamente a recuperar los caminos".
La norma de los espacios rurales evitará cancelas y alambradas
La ordenanza, que tiene como principal objetivo fomentar la conservación del medio natural e impulsar la diversificación del paisaje natural, pretende a su vez evitar la usurpación del dominio público mediante construcciones, alambradas y cancelas en las zonas rurales, causantes de la fragmentación de los caminos públicos. Además, la ordenanza establecerá una serie de sanciones para aquellos que infrinjan alguna de las normas establecidas.