Tantas son las noticias aparecidas de repente sobre el Plan de la SIerra, que incluyo aquí todas las aparecidas
EL DOCUMENTO SE APROBARÁ EL LUNES DE FORMA INICIAL.
El plan de la Sierra aconseja no legalizar parcelas en futuras revisiones del PGOU
La situación de las urbanizaciones irregulares no varía al mantenerse igual la clasificación del suelo.Plantea 11 medidas valoradas en 39,4 millones para proteger y ordenar 30.000 hectáreas.
10/06/2010 ISABEL LEÑA
El plan especial de protección y ordenación de la Sierra deja las parcelaciones tal y como estaban contempladas en el PGOU pero intenta poner freno a nuevos procesos de legalización. El documento que el Consejo Rector de la Gerencia de Urbanismo aprobará el lunes de forma inicial señala que es "aconsejable no iniciar procesos futuros de legalización" en las parcelaciones irregulares que puedan venir de la mano de revisiones del PGOU próximas. De esta forma, limita la expansión urbanística en una zona en la que hay 24 urbanizaciones ilegales, 10 reconducibles mediante planes especiales de mejora del medio rural y 14 que no lo son al estar en suelo no urbanizable de especial protección con edificaciones a las que no se permiten reformas ni dotación de servicios.
Tal y como se esperaba, y en contra de buena parte de las 45 sugerencias que se hicieron al plan en su fase de avance, "la situación de las parcelaciones ilegales no se va a alterar", aclaró el presidente de la Gerencia de Urbanismo, Francisco Tejada, por lo que seguirán estando en suelo no urbanizable con parcelación, tal y como marca el PGOU. Tejada reiteró que "este no es el documento urbanístico para hablar de parcelaciones", ya que "el PGOU es el único que establece lo que puede ocurrir". El plan hace hincapié en que las parcelaciones ilegales están "fuera de ordenación".
El texto sigue dejando abierto el camino a los planes de mejora del medio rural e indica que, de los redactados hasta el momento, no hay ninguno aprobado porque "entran en contradicción con lo estipulado en la legislación urbanística". Eso sí, aconseja que se les haga un seguimiento escrupuloso. Estos planes establecen medidas de regeneración ambiental, de salubridad y obras de conservación para garantizar la habitabilidad. El plan de la Sierra aconseja que no se conviertan en "proyectos urbanísticos encubiertos". Además, pide que contemplen medidas contra la erosión y planes contra incendios. Es más, recomienda que se investiguen los incendios forestales, muy frecuentes en esta zona, y que los núcleos de población se doten de planes de autoprotección operativos, que deben ser conjuntos para las parcelaciones próximas entre sí.
La principal finalidad del plan es "proteger los valores naturales de la Sierra y ordenar de forma adecuada" sus 30.000 hectáreas, según explicó Tejada en su presentación. Para ello, el equipo de la UCO que ha redactado el plan ha perfilado once medidas presupuestadas en 39,4 millones de euros, que necesitarán más adelante proyectos de actuación, para las que no se han establecido plazos. El coordinador de los trabajos, el catedrático José Roldán Cañas, indicó que el plan "pretende acercar la Sierra a toda la ciudadanía", tanto la de Córdoba como la de fuera.
Las medidas previstas dotarán a la Sierra de puntos de atención a los visitantes, de parques periurbanos y recreativos, miradores, un observatorio nocturno, una red de senderos, una vía verde entre Córdoba y Almorchón, zonas de baño, microreservas faunísticas. Además, se elaborará un catálogo de bienes y se restaurarán zonas degradadas.
De puntillas
10/06/2010 ISABEL LEÑA
El plan especial de la Sierra pasa de puntillas sobre las parcelaciones ilegales. No es nada nuevo, ya que se advirtió en la fase de avance, pero los colectivos vecinales esperaban que se les diera una solución. Al margen de esta carencia --que suple el PGOU--, el plan es un documento muy ambicioso con medidas que, de llevarse a efecto, dotarán a Córdoba de un espacio muy atractivo para el ocio. Con él, la Sierra se convertirá en una oferta más para el turismo y la cultura.
ANALISIS.
Un paseo por el paisaje
La creación de un centro de visitantes en el Lagar de la Cruz, de un área recreativa junto a El Naranjo y de un observatorio en Torre Arboles, entre las novedades del plan.
10/06/2010 ISABEL LEÑA
Embalse San Rafael de Navallana cobra protagonismo en el plan.
Foto:A.J. GONZALEZ
La Sierra tiene heridas que el plan especial pretende curar. Para ello plantea medidas que servirán para ponerla en valor y en las que deberán participar varias administraciones. La primera fija seis puntos de información, que centralicen las actividades y ofrezcan rutas guiadas. Para ello se aprovecharán los centros cívicos de Trassierra y Cerro Muriano y se potenciará el Lagar de la Cruz. Allí habrá un centro de visitantes con párking y servicios.
La segunda plantea transformar La Palomera --junto a El Naranjo-- y el entorno del arroyo Pedroche en un parque periurbano para frenar el deterioro que sufre por su ocupación incontrolada. Tendrá 100 hectáreas con zonas para peroles, juegos infantiles, actividades deportivas y restauración. La tercera sugiere que los alrededores de San Rafael de Navallana se conviertan en parque recreativo. Se realizarán actividades ligadas al agua y dispondrá de equipamientos y servicios. Para ello, entre otras cosas, habrá un edificio multifuncional, cámping, albergues, hotel rural, senderos, merenderos, miradores y restaurante.
La cuarta pretende poner en valor los cinco miradores naturales de la Sierra --La Aduana, Santo Domingo, Torre Arboles, Ermitas y Las Niñas--.
La quinta convertirá a Torre Arboles en un lugar perfecto para mirar el firmamento. Allí habrá un observatorio nocturno con equipos de visión y cartelería interpretativa del cosmos. La sexta configura una red de 17 senderos que se acondicionarán y señalizarán.
La séptima se centra en el trazado ferroviario Córdoba-Almorchón, con sus túneles y puentes, que se habilitará como vía verde y comunicará Córdoba y Cerro Muriano con Los Villares y La Palomera.
La octava afecta a los puentes de los Arenales, los Boquerones, Alto de las Cabreras y San Rafael de Navallana, que recuperarán su uso como zonas de baño con medidas correctoras.
La novena plantea crear una red de microreservas faunísticas en Las Jaras, canteras del arroyo Pedroche y fuentes de El Elefante y Bejarano. En ellas se estudiarán especies de gran valor.
La décima propone la elaboración de un catálogo de bienes con los edificios religiosos, minería histórica, puentes y acueductos, molinos, fuentes y alcubillas. Por último, la undécima sugiere proyectos para restaurar áreas degradadas, entre los que se incluyen actualizar las parcelaciones ilegales, actuaciones para acabar con vertederos y descontaminar acuíferos, y limpieza de escombros.
En cuanto a la ordenación territorial, la zona queda dividida en suelo no urbanizable de especial protección por legislación específica o por planificación territorial --corredor del Guadiato, forestal, dehesa, Palomera y Pedroche, Navallana, frente a Sierra Morena, áreas adehesadas, zonas cerealísticas, periurbanas, Medina Azahara, caminos y yacimientos--; suelo no urbanizable natural o rural; y sistemas generale
Quedan prohibidos los usos industriales y las energías renovables en todo el ámbito
10/06/2010
No hay ni una zona en la que se permitan usos industriales ni energías renovables. En cambio, tienen cabida usos primarios y el mantenimiento de obra pública en algunas áreas. Entre los autorizables están los usos recreativos, restauración, turísticos no residenciales y equipamientos. También se prohíben viviendas residenciales, ya que solo se permiten las vinculadas a fines agrarios en zona forestal, dehesa, y en los entornos del embalse de La Palomera y del arroyo Pedroche. El suelo no urbanizable de la Sierra aparece en el plan dividido en categorías y subcategorías adaptadas a la LOUA.
El plan para proteger la Sierra deja sin resolver la salida a 24 parcelaciones ilegales
ABC-Sevilla
Jueves , 10-06-10
A. R. VEGA
CÓRDOBA. El Plan Especial de Protección de la Sierra de Córdoba (Pepsc) pasa de puntillas sobre las 24 parcelaciones ilegales existentes, que aglutinan entre 1.400 y 1.660 viviendas con servicios precarios (fosas sépticas, pozos incontrolados, falta de alumbrado público, de agua y de acceso...). El mayor nudo gordiando se queda tan enredado como ya estaba, sin perspectiva de solucionarse al menos a medio plazo.
La principal causa de degradación y de impacto ambiental al que se enfrenta este vasto espacio, que ocupa alrededor de 30.000 hectáreas (entre el 25 y 30% del término municipal), seguirá en el limbo, como ya estaba en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), o a merced de planes específicos para mitigar sus efectos en el paisaje que deben presentar los propietarios, pero que ni tan siquiera le otorgan visos de regularización.
Entre los asentamientos que están fuera de ordenación, donde residen entre 2.500 y 4.000 personas, cabe distinguir dos grupos. En el primero hay 14 parcelaciones irreconducibles -que fueron recogidas en un documento previo- que no pueden acogerse a ninguna medida correctora. Abarca medio millar de viviendas, en su mayoría segundas residencias, donde viven entre 1.000 y 1.500 personas, según los cálculos iniciales que realizó el equipo redactor. Entre éstas se encuentra la urbanización de San Cristóbal, la primera en la que el Ayuntamiento llevó a cabo la demolición de un chalé sin licencia en 2008.
Sin legalización futura
En el otro grupo se hallan otros diez núcleos, que pueden acogerse a planes especiales de mejora del medio rural. En contra de lo que plantea la Federación de Asociaciones de Vecinos Al-Zahara, el documento aboga por que no se legalicen en el futuro, cuando de revise el PGOU. Argumenta que esto podría servir de estímulo para seguir edificando y se limita a pedir a las Administraciones que sigan estrechando el cerco para que el ladrillo no se expanda más.
El Plan de la Sierra no es sino la crónica del olvido anunciado sobre las parcelas, que se verá consumado el lunes con su aprobación inicial por parte del consejo rector de la Gerencia Municipal de Urbanismo. Emana de un estudio encargado a un equipo multidisciplinar de la Universidad de Córdoba, coordinado por el catedrático José Roldán Cañas. Sus primeros trabajos se remontan a 2003, con la firma de un convenio de colaboración que luego se amplió en septiembre de 2005.
Casi siete años de investigación, que quedaron plasmados en un diagnóstico y un texto de avance que se ha retrasado en el tiempo, han dado como resultado un conjunto de once propuestas para recuperar espacios deteriorados y buscarles un filón turístico, con las reservas que la propia Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA) marca sobre nuevas edificaciones en suelos no urbanizables de especial protección. El plan, que ayer fue expuesto a colectivos ciudadanos, rechaza la mayoría de las 45 sugerencias planteadas.
La mitad de ellas, presentadas por asociaciones vecinales, reclaman una solución a las parcelas ilegales que el plan sigue sin darles. Tanto los miembros del equipo redactor como el edil de Urbanismo, Francisco Tejada, insistieron en que el Pepsc «no entra a ordenar» las 24 parcelaciones» existentes, porque, según subrayó el concejal de IU, «éste no es un documento para hablar de parcelas, es el PGOU el que establece lo que puede o no ocurrir con ellas»
El Ayuntamiento autorizará obras de conservación en las parcelas de la Sierra
La nueva planificación municipal otorga a los núcleos irregulares el carácter de fuera de ordenación, lo que permite acudir a Urbanismo para que autorice actuaciones que garanticen la habitabilidad
R. Ruiz | Actualizado 10.06.2010 - 01:00
Trabajos de demolición de una parcela en el cerro San Cristóbal.
El Plan Especial de Protección de la Sierra de Córdoba permitirá que los propietarios de parcelas irreconducibles realicen obras de reparación y conservación de sus viviendas sin miedo a recibir una multa de la Gerencia de Urbanismo y con todo el derecho a reclamar una licencia de obras con todas las de la ley. El documento de aprobación inicial, presentado ayer a todos los agentes sociales y ciudadanos, estima que las 11 parcelaciones de la Sierra que no pueden ser regularizadas se encuentran fuera de ordenación. El plan elimina la categoría que se concibió en el PGOU (suelo no urbanizable con parcelación) para crear una nueva categoría que se llama suelo no urbanizable forestal severamente transformado. Dicho cambio implica que, al no ser un terreno explícitamente protegido por ninguna norma, se le aplica la disposición adicional primera de la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía, que dice lo siguiente: "Con carácter general sólo podrán realizarse las obras de reparación y conservación que exija la estricta conservación de la habitabilidad o la utilización conforme al destino establecido".
El plan no establece ni medidas de erradicación para las parcelaciones ni cuestiones relativas a una legalización, que son desaconsejadas por el equipo redactor. Se toma un camino intermedio, que es aplicar la categoría de fuera de ordenación, que puede ir más allá de una mera reparación de ventanas o un cambio de tejas. La norma permite, expresamente, el desarrollo de medidas de consolidación de las construcciones dañadas en el caso de que no esté prevista ni su expropiación ni su demolición en el plazo de cinco años. El plan especial no realiza ninguna apreciación en este sentido. Sí se propone, de forma específica, que se reciclen edificaciones para la creación de negocios turísticos que no supongan el establecimiento de una población estable como los alojamientos turísticos o, incluso, restaurantes.
Los efectos de la aplicación de esta normativa tienen el espíritu de no permitir ninguna vivienda más en la zona de la Sierra donde desde los años 70 se han levantado 1.400 viviendas, según el documento de diagnóstico. La cuestión es que los propietarios de casas con cierta antigüedad (se considera parcela histórica la que tenía escrituras o asiento en el Registro de la Propiedad antes de la aprobación inicial del PGOU) pueden estar tranquilos. Las casas podrán ser reparadas y consolidadas sin problemas, incluso con un permiso oficial tramitado ante la Gerencia de Urbanismo. Una vez destruidas, por las razones que sea, será ilegal volverlas a levantar.
En principio, según dijo el teniente de alcalde de Urbanismo, Francisco Tejada, será legal tramitar los planes especiales de mejora del medio que se establecían en el PGOU para establecer determinados servicios básicos a la zona. Otra cosa distinta es que se lleguen a aprobar. Según la normativa específica del plan especial, que ahora se tiene que negociar políticamente, se establecen una serie de condiciones bastante rigurosas con el objetivo de que el tendido de servicios no acabe generando núcleos de población en los que la realidad acabe suplantando la legalidad.
El documento establece una serie de criterios para dar respuesta a los actos de parcelación ilegal nueva. Será motivo para activar la alarma municipal cuestiones prácticas como la apertura de caminos o vallados así como señales externas. Se considerará zona peligrosa, por ejemplo, aquella en la que aparezcan octavillas en las que se publicite la venta de suelo para poder levantar una casa sin papeles
Urbanismo introduce una disposición que abre la puerta a la creación del teleférico de las ermitas
El organismo municipal cataloga el proyecto como infraestructura territorial que puede aprobarse
R. R. | Actualizado 10.06.2010 - 01:00
Uno de los proyectos turísticos más raros que se han activado en Córdoba, el teleférico de las ermitas, tendrá cabida en el plan especial de la Sierra. La Gerencia de Urbanismo ha incluido un artículo que permite la construcción de "infraestructuras territoriales", concepto que engloba a aquellas dotaciones que están ligadas a un proyecto concreto y que tienen que realizarse en un entorno determinado. En realidad, dicha descripción vale para un roto y para un descosido pero en Urbanismo se la aplican al teleférico o tren cremallera de las ermitas, que se pretende completar con un proyecto turístico-hostelero en el entorno monumental de los cenobios de la Sierra.
Urbanismo no firma un cheque en blanco en este aspecto y condiciona el desarrollo de la medida a que se presente un proyecto que no genere problemas visuales y que reduzca en lo mínimo posible las afecciones al entorno.
El proyecto, presentado en su día al gobierno municipal, gustó desde el principio aunque existen detractores, sobre todo en el mundo del conservacionista. Urbanismo propone una protección integral del frente de fachada de la Sierra mediante una categoría propia.
En otro orden de cosas, el plan especial aborda una serie de riesgos que padece la Sierra. Una es establecer medidas para amortiguar el impacto de dos infraestructuras muy grandes: el ferrocarril Córdoba-Norte y el desdoble de la Badajoz-Granada. Además, reclama a los responsables públicos que establezcan medidas para regular los cotos de caza y para gestionar la sobrepoblación de ungulados, como los ciervos.
M.La GMU votará el próximo lunes la aprobación inicial del Plan Especial de la Sierra
20 Minutos
El presidente de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) de Córdoba, Francisco Tejada, informó hoy de que el consejo rector de dicho organismo autónomo votará el próximo lunes la aprobación inicial del Plan Especial de Protección y Ordenación de la Sierra de Córdoba.
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EUROPA PRESS. 09.06.2010
Durante la presentación pública del documento, Tejada explicó que el documento emana del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y, sobre todo, de un compromiso del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Córdoba de "proteger los valores naturales de la Sierra de Córdoba" y "ordenar de forma adecuada esta vasto espacio que supone una superficie aproximada de 30.000 hectáreas, es decir, un 30 por ciento aproximadamente del término municipal de Córdoba".
El Plan Especial de la Sierra ha sido redactado, bajo la dirección de técnicos de la GMU, por un equipo multidisciplinar que incluye a expertos de la Universidad de Córdoba (UCO) coordinados por el catedrático José Roldán Cañas, después de la firma de un convenio entre las dos instituciones.
Tras un periodo previo de información y análisis, este equipo realizó un exhaustivo diagnóstico de la problemática de la Sierra de Córdoba, como por ejemplo, la ocupación del dominio público, la contaminación y sobreexplotación de acuíferos, el impacto por uso y actividades no reguladas, actividades extractivas, incendios forestales, deforestación y erosión, etc.
El responsable de la GMU explicó que después de este completo diagnóstico sobre la situación de este enclave natural, el equipo redactor trazó unos objetivos que se resumieron en el avance del Plan Especial para la ordenación del territorio, el fomento del aprovechamiento sostenible, la protección y conservación de los valores naturales existentes, la puesta en valor del dominio público, la protección del patrimonio histórico, la prevención contra los riesgos naturales y la restauración de áreas degradadas. Se pretende también su uso potencial como atractivo turístico, pero siempre en respeto a la protección del entorno.
Actuaciones concretas
En concreto, el Plan de la Sierra propone once actuaciones concretas para la puesta en valor de un espacio que apenas dista unos metros del propio casco urbano de la ciudad de Córdoba y que se extiende como un gran corredor verde de Este a Oeste entre los parques naturales de Cardeña-Montoro y de Hornachuelos.
En concreto, las actuaciones son la potenciación y creación de nodos estratégicos para recibir e informar al visitante, la creación de un parque periurbano en la zona de La Palomera y el entorno del arroyo Pedroche. Asimismo, el plan contempla la creación de un parque recreativo en el entorno del embalse de San Rafael de Navallana, la puesta en valor de la red de miradores municipales de la Sierra de Córdoba y la creación de un observatorio natural nocturno en el Cerro de Torre Árboles para fomentar el estudio de la astronomía.
De igual modo, la intervención se centrará en la recuperación y adecuación de una red de senderos municipales tradicionales, la reconversión del antiguo trazado ferroviario entre Córdoba y Almorchón en Vía Verde y la recuperación, dotación y puesta en uso de las zonas de baño tradicionales en la Sierra de Córdoba.
También se creará una red de microrreservas faunísticas, se elaborará un catálogo de Bienes y Espacios Protegidos y se planificará una serie de medidas y proyectos encaminadas a la restauración de áreas degradadas.
Tejada señaló además que el Plan de la Sierra establece una ordenación para las más de 30.000 hectáreas de enclave natural a proteger. Así, fija una ordenación de Suelo no Urbanizable en categorías y subcategorías según las determinaciones contenidas en la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA).
Además, se plantea una normativa urbanística que regula los usos y edificaciones para el ámbito de la sierra, prohibiendo aquellos que suponen una amenaza para la conservación de los elementos naturales y definiendo los usos compatibles: recreativos, turísticos no residenciales y equipamientos, en cada una de las calificaciones de suelo establecidas.
Según explicó el responsable municipal, una vez que el documento se apruebe inicialmente, se someterá a exposición pública para el periodo de alegaciones y seguidamente se pedirán los informes sectoriales para su posterior aprobación provisional.
El plan de la Sierra obvia las 14 parcelaciones en suelo catalogado
Ni los vecinos ni los ecologistas se muestran satisfechos con el documento de Urbanismo porque no contiene una propuesta global sobre el problema
R. Ruiz | Actualizado 11.06.2010 - 01:00
El plan de la Sierra ha establecido una categoría específica para las parcelaciones que estaban reconocidas en el PGOU como susceptibles de disponer, de algún modo, de una serie de servicios básicos sin poder ser legalizadas. Dichas parcelaciones son El Negrete, El Melgarejo, Casilla del Aire, Las Siete Fincas, La Torrecilla-La Gitana, El Jardinito, Las Solanas del Pilar, Virgen de la Cabeza o Pinar de Torrehoria y la parcelación llamada Cerro Muriano.
Ambos grupos quedarían fuera de ordenación según la tesis mantenida por los responsables de la Gerencia de Urbanismo en la presentación del plan especial de acuerdo a una ley, la de Ordenación Urbanística de Andalucía, que no existía en el momento en que entró en vigor el Plan General de Ordenación Urbana de Córdoba. Dicha disposición permite autorizar obras de mantenimiento y excepcionalmente de consolidación en el caso de que no exista un interés por expropiar o derribar las parcelas en un intervalo de tiempo de cinco años. Dicha afirmación implica una cierta consolidación de la actual situación en lo que concierne al propietario de una casa en particular mientras que las expectativas que se habían creado en los distintos sectores se desvanecen. El problema sustancial es que ambos grupos de parcelaciones se encuentran en una situación distinta. Las 11 correspondientes al suelo forestal transformado no se encuentran, en puridad, sobre terrenos protegido. Son irregulares y están en suelo no urbanizable pero el espacio que ocupan no tienen un valor relevante reconocido como tal. Las 14 restantes, sí, lo que tiene una serie de repercusiones que van desde al ámbito administrativo al penal. El plan de la Sierra no establece ningún tipo de medida específica para unas u otras al haberse decidido que es el PGOU quien rige sobre todas ellas y, por ende, que no corresponde al plan especial adoptar soluciones. El documento urbanístico tampoco le ha aclarado a los propietarios hasta qué punto es viable que parcelaciones como Casilla del Aire o Siete Fincas, que están tramitando unos planes para dotarse de unos ciertos servicios vayan a tener más o menos facilidades y en qué marco. Casilla del Aire empezó a tramitar su documento en noviembre de 2006, expediente paralizado por un informe desfavorable de la Consejería de Medio Ambiente. Siete Fincas se encuentra en una situación similar y lleva desde septiembre de 2007 tramitando con su plan específico de mejora sin ningún éxito.
Las reacciones de los principales portavoces sobre esta cuestión, vecinos y ecologistas, demuestran cuál ha sido la acogida. Nadie se da por satisfecho en tanto en cuanto no se ha desarrollado una estrategia específica. Emilio Góngora, de la Federación de Asociaciones de Vecinos, asegura que el plan de la Sierra no da respuesta a una realidad y es que se trata de una zona habitada en la que existen riesgos considerables. La entidad reconoce sentirse muy decepcionada con el documento porque no entra a ofrecer soluciones en aquellas zonas que se reconocían en el PGOU como reconducibles mientras se plantea una inversión de 39 millones que no se sabe de dónde va a salir ni cuándo.
En el mundo ecologista, la respuesta es distinta. Juan Escribano, de Ecologistas en Acción, saluda la llegada del plan de la Sierra pero afirma que es un instrumento incompleto "por cobardía política del gobierno municipal" para afrontar la situación de los parcelistas, personas que "han cometido una ilegalidad y son delincuentes". Bartolomé Olivares, de Acción Ecologista Guadalquivir, afirma que la Gerencia de Urbanismo ha acabado presentando el plan "porque se le caía la cara de vergüenza con tanto retraso". Olivares reconoce que se avanza en muchos aspectos como determinas acciones previstas, entre las que se encuentra el gran parque periurbano de la Palomera. Sin embargo, asegura que se prometió que el plan que tendría una estrategia global sobre las parcelaciones y que esa parte no se ha cumplido.
Presionan a IU para que cambie su propuesta del plan de la Sierra
Tanto el Partido Popular como el Partido Socialista, que lo aprobará inicialmente, entienden que no es viable abordar el proyecto sin hablar de parcelaciones
E. D. | Actualizado 12.06.2010 - 01:00
El Partido Popular y el Partido Socialista han iniciado una estrategia de presión sobre la Gerencia Municipal de Urbanismo para que modifique el texto del Plan de la Sierra, que se aprobará inicialmente, para incluir en el trámite sucesivo una estrategia definida sobre las parcelaciones ubicadas en esta zona de la ciudad. Responsables de ambos partidos apostaron ayer por efectuar estas modificaciones frente a la posición del alcalde, Andrés Ocaña, que aseguró que la Gerencia de Urbanismo siempre ha asegurado que las parcelaciones se regulan en el PGOU. El regidor se mostró contrariado por las críticas relativas a la rapidez con la que la Gerencia ha presentado el proyecto, sin debate previo. "Parece que no acertamos nunca porque en otras ocasiones se nos acusa de ser demasiado lentos", bromeó. A su juicio, el Plan de la Sierra es un documento participado, en el que se amplió el periodo de sugerencias en la fase de avance y que no recogió un número importante de demandas ciudadanas.
Según el portavoz popular, José Antonio Nieto, el plan de la Sierra llega con cinco años de retraso sobre las previsiones inicialmente planteadas. Dijo además que el PP comparte que las 30.000 hectáreas de esta zona de la ciudad tienen que contar con una protección suficiente por su alto valor natural. Sin embargo, aseguró que "lo que no puede ocurrir es que el ser humano sea un obstáculo" y que se deben arbitrar medidas para su disfrute. Reclamó además un plan económico que suponga sacar rendimientos a los valores naturales.
Por su parte, el portavoz socialista, Rafael Blanco, dijo que su grupo apoyará la propuesta inicial aunque aseguró que el documento no puede centrarse "en las setas" y pasar de puntillas por el problema de las personas. Dijo que, efectivamente, el plan de la Sierra no puede alterar el PGOU pero sí puede desarrollarlo e, incluso, proponer cambios para que, en un futuro, sean evaluados por los organismos competentes. Blanco abogó por que un documento tan importante vaya acompañado de un "amplio debate ciudadano" y aseguró que el propósito de su grupo político es que el plan "salga adelante".
En la misma línea se pronunció el secretario provincial del PSOE, Juan Pablo Durán, quien se mostró partidario de abordar el plan de la Sierra desde una "visión más global". Matizó, no obstante, que el cambio de tipología de los usos del suelo podría formar parte de un debate en paralelo y apeló a la "pedagogía política" para analizar este asunto. Al aludir a la calificación de los suelos, uno de los puntos más controvertidos del citado plan de la Sierra, Durán abundó en la posibilidad de "hablar de ello", si bien lo ligó al contenido del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).
Otra de los responsables que abordó ayer el plan de la Sierra fue el presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos Al-Zahara, José Rojas. El dirigente del colectivo defenderá la existencia de planes de seguridad para las parcelaciones de estos enclaves. Rojas declaró que, consciente de la "dificultad" que entraña la reconducción de estas viviendas, "lo único que pedimos es que se garantice la seguridad para evitar situaciones de riesgo como las que vivimos hace sólo unos meses a través de las inundaciones".
Ocaña dice que el Plan Especial de la Sierra es un "buen documento"
11/06/2010 REDACCIÓN
MÁS INFORMACIÓN
El alcalde de Córdoba, Andrés Ocaña (IU), afirmó hoy que el Plan Especial de la Sierra, que se aprobará inicialmente el próximo lunes en el consejo rector de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU), es un "buen documento", que amplía los espacios a proteger y establece los usos compatibles con los valores ambientales de la sierra.
En rueda de prensa, el alcalde precisó que el Plan Especial no regula las parcelaciones ilegales, sino que lo hace el Plan General de Ordenación Urbana, si bien destacó que se ha trabajado en incrementar los elementos de disciplina urbanística.
El regidor municipal, que hizo hoy una valoración sobre la actualidad municipal, habló también del Plan Especial de la carretera de Palma, que si bien en un primer trámite contemplaba la eliminación de 10.000 metros de las naves ilegales de Colecor del empresario Rafael Gómez, finalmente, será 15.000 metros la superficie afectada.
Ocaña explicó que el documento se ha modificado tras el periodo de alegaciones, ya que se ha estimado una de ellas, por lo que se ha decidido ampliar la propuesta inicial de 10.000 metros, de los 40.000 que ocupan las naves que Gómez construyó sin licencia.
Tejada no prevé cambios en la política sobre las parcelas irregulares de la Sierra
El PSOE reclama a sus socios de gobierno que varíen el Plan de la Sierra para su aprobación final
F. R. C. | Actualizado 15.06.2010 - 01:00
Vista de la Sierra de Córdoba con una panorámica de la capital al fondo.
El Plan de la Sierra no es el lugar idóneo para hablar de las viviendas irregulares de esta zona de la ciudad. Al menos, eso fue lo que argumentó ayer el teniente de alcalde Francisco Tejada que, durante la aprobación inicial de este proyecto, afirmó que no es ni debe ser el objetivo adoptar medidas específicas para los suelos no urbanos con edificaciones o, lo que es lo mismo, los núcleos de parcelas irregulares que existen en esta zona de la geografía cordobesa. Tejada respondió así a las críticas que se han vertido en los últimos días sobre la ausencia de determinaciones sobre las viviendas ilegales en el Plan de la Sierra y afirmó en ese sentido que, de quererse modificar la situación que existe ahora mismo en torno a ese tema, se debería proponer "una innovación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU)". El argumento esgrimido por Tejada en ese sentido es que un plan especial no es el lugar donde se deben abordar las políticas urbanísticas estructurales. En todo caso, y al ser preguntado sobre si cree que es el momento de plantear un cambio del PGOU en ese sentido, el presidente de la Gerencia fue parco en palabras, aunque claro, y dijo tan sólo que en el momento actual "no está previsto". La posición de IU en este asunto deja claro que por ahora no hay intención en el equipo de gobierno de afrontar modificaciones esenciales en este espinoso asunto, por lo que todo indica que se seguirá el camino evidente: dejarlo tal como está. Status quo.
Tejada, que compareció ante los medios momentos antes del Consejo de Gerencia, defendió las virtudes del Plan de la Sierra, del que dijo que "ordena de forma adecuada esta vasto espacio que supone una superficie aproximada de 30.000 hectáreas; es decir, un 30 por ciento aproximadamente del término municipal de Córdoba". Asimismo, también explicó las diversas actuaciones que se van a llevar a cabo para la protección de esta zona y para su difusión como lugar de ocio y atractivo turístico, de las que ya informó El Día la pasada semana.
El Partido Socialista votó por su parte junto a IU a favor del inicio del trámite del Plan de la Sierra, aunque con condiciones. En ese sentido, Rafael Blanco explicó que respaldan este paso para que la ciudad debata ahora el proyecto, aunque, en contra de lo que opinan sus socios de gobierno, explicó que el PSOE pretende que se incluyan en el plan los núcleos habitados. En ese sentido, agregó que se olvida a las personas que viven en la Sierra tanto de forma legal como irregular. "Se debe analizar el factor humano de forma positiva y no entender la Sierra como una reserva natural", agregó Blanco.
El Partido Popular mantuvo por su parte, como ya había avanzado el día anterior, su voto contrario al Plan al considerar que es ambiguo, ya "que no analiza el deterioro natural de la zona ni sus causas, carece de autocrítica, plantea restricciones muy elevadas para el futuro y no va dotado de los fondos necesarios para ser algo que más que papel", según explicó el portavoz popular, José Antonio Nieto. No obstante, confió en que se modifique y en poder votar a favor más adelante.
PLAN ESPECIAL DE PROTECCION DEL NORTE DEL MUNICIPIO.
Tejada garantiza que "con IU no se construirá en la Sierra"
El plan se aprueba inicialmente con reticencias del PSOE, que abre un amplio debate público.Izquierda Unida se queda sola al defender un documento que no habla de los residentes.
15/06/2010 JUAN M. NIZA
El teniente de alcalde de Urbanismo, Francisco Tejada, anunció ayer a este periódico que "mientras esté IU, no se construirá en la Sierra" ni se alterarán los planes y la filosofía de protección del entorno, por ejemplo, cuando se redacte el próximo Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU).
Tejada hizo estas manifestaciones minutos antes de iniciarse la sesión del consejo de la Gerencia de Urbanismo en la que se aprobó inicialmente el Plan Especial de Protección y Ordenación de la Sierra (Pepos), el esperado documento para la protección de las 30.000 hectáreas de esta zona del municipio, regular las actividades e impulsar su aprovechamiento socioeconómico, cultural y turístico.
El documento obtuvo el respaldo de los socios en el gobierno local pero, como había anunciado el PP horas antes, salió con el voto negativo de los populares.
Incluso los consejeros de IU se quedaron solos al defender el documento en un punto que ha sido criticado por el movimiento ciudadano: el que no se tenga en cuenta la situación de los residentes en esta zona del municipio, tanto los que habitan núcleos irregulares como los equipamientos y el futuro de los que viven en zonas urbanas.
TRES MESES PARA ALEGAR Al respecto, el primer teniente de alcalde y portavoz del grupo socialista, Rafael Blanco, explicó que los concejales socialistas votaron a favor del plan para no entorpecer ni alargar aún más su tramitación (comenzó a gestarse nada menos que hace siete años) ya que la intención es que se apruebe "provisionalmente antes de final de año" porque "debe estar aprobado definitivamente en este mandato". Eso sí, Blanco coincide con las críticas del movimiento ciudadano en que el plan debe de contemplar el factor humano y la situación de los residentes, por lo que anuncia que el plan "deberá modificarse para incluir los núcleos habitados". Todo ello, tras abrirse "un amplio debate ciudadano sobre el documento" (sin decir cómo se concretará) y de "contar con un plazo de alegaciones de tres meses", punto este último que se aprobó en el consejo de la Gerencia de Urbanismo de ayer.
Blanco discrepó así de los argumentos que ayer reiteró Tejada, al recordar que el actual PGOU, un documento de mayor rango que el plan especial de protección, ya regula suficientemente los espacios urbanos y urbanizables, mientras que el Pepos tiene su gran función reguladora en el resto del ámbito en suelo rural o de especial protección medioambiental
Los ediles del gobierno local coinciden en criticar la postura de los populares
15/06/2010
En lo que sí estuvieron ayer totalmente de acuerdo los consejeros de Urbanismo de IU y PSOE respecto al Plan Especial de Protección de la Sierra fue en criticar al PP. Según argumentaron lo populares para votar en contra del plan, el proyecto "no solo llega tarde, sino que llega mal, con un enfoque que no nos gusta", ya que "tolera lo que se ha hecho mal --dijo Nieto refiriéndose al problema de los núcleos irregulares-- y bloquea lo que se puede hacer bien en el futuro". "Crea muchas dudas, pues es un documento que casi no hace autocrítica", afirma.
Por parte de Izquierda Unida, el teniente de alcalde de Urbanismo, Francisco Tejada, ironizó sobre los argumentos del PP, "que cambia de opinión cada momento con posturas contradictorias". También el primer teniente de alcalde, el socialista Rafael Blanco, criticó la postura contraria al plan de los populares, y consideró que "una vez más, en un documento importante para la ciudad, el PP se dedica a votar en contra sin dar alternativa alguna, por lo que continúa su interés en obstruir todos los temas de ciudad, en lugar de dar soluciones
