Artículo para el Anuario de la Fundación de Estudios Rurales
A pesar de que cada vez aumenta más el interés por disfrutar de la naturaleza, y dado que gran parte de la superficie española es privada, el principal espacio que se puede utilizar son los caminos.
De ahí que los problemas debidos a la apropiación o al abandono de los mismos no cesan de crecer. Se constata que las Administraciones autonómicas y locales no hacen lo suficiente para proteger los bienes públicos de los que son titulares, dejando en la indefensión a los que quieren utilizarlos, y la movilización ciudadana, aunque cada vez más frecuente, no es suficiente.
Se requeriría un cambio normativo y una mayor concienciación de las Administraciones para que aumentara la protección de los caminos como herencia histórica y condición necesaria para la promoción económica, medioambiental y de salud de nuestros pueblos y ciudades.