Unas 350 personas participaron ayer en una manifestación por la tala de árboles en una finca de Trassierra cercana a los Baños de Popea, realizada por la empresa Arenal 2000.
Con el día que hacía ayer en Trassierra y todos con las caras largas. «Hay motivo», parecía que mascullaban los ecologistas mientras desenrollaban una pancarta con la leyenda «Salvemos el Bejarano» en las mismas puertas del centro cívico del barrio periférico. «Hay motivo», decía el gesto del ubicuo Paco Nieto -presidente de la Federación Al-Azahara- a las doce y poco de la mañana, justo cuando comenzó a dirigirse, micrófono en mano, a las 350 personas reunidas para protestar por la tala de árboles en una finca próxima al Arroyo del Molino, propiedad de Arenal 2000.
El preboste del movimiento vecinal comenzó su intervención con un exordio digno de un manual de participación ciudadana: «Hoy no nos hemos reunido en Trassierra para hacer una manifestación, sino para realizar una concentración», sentenció, sembrando de silencio y desconcierto el auditorio. «Sí, nos concentramos, pero no nos manifestamos, para mostrar nuestro rechazo a quienes han causado el desastre ecológico de Trassierra», insistió en referencia al perjuicio que ha infligido la constructora de Rafael Gómez al medio natural en el paraje ya citado, y que es investigado ahora por la Junta y ha valido la apertura de un expediente sancionador en el Ayuntamiento. «Y no añadimos más calificativos -continuó el líder vecinal en tono mayestático-, porque ello corresponderá a los jueces en su momento».
La de Francisco Nieto fue la única intervención pública en la media hora que duró la manifestación -perdón, concentración- promovida por la Federación Al-Zahara y la asociación Veneros del Bejarano, radicada en Trassierra. Mas el presidente de esta última entidad, Rafael Valenzuela, habló para los medios de comunicación en el curso de la apacible reunión ciudadana. «Le hemos encargado un estudio técnico a un ingeniero para que cuantifique el daño que ha realizado Arenal 2000; cuando tengamos el informe, acudiremos a la Fiscalía», señaló el dirigente vecinal, que lamentó que ningún miembro del equipo de gobierno del Consistorio acudiera a la convocatoria reivindicativa ni «hubiera condenado aún» los hechos.
«No nos explicamos cómo ha podido ocurrir lo de la tala sin que el Ayuntamiento se diera cuenta, ni tampoco que ningún concejal de IU haya alzado la voz para hablar del tema, cuando parte de la tala se ha realizado en suelo municipal», había dicho hacía unos minutos Francisco Nieto.
«A mí nadie me ha invitado a esa manifestación en Trassierra; es cierto que del equipo de gobierno no ha ido nadie, pero IU sí ha estado», declaró a ABC horas después el presidente de la Gerencia de Urbanismo, Andrés Ocaña, en referencia al coordinador local de la coalición en la capital, Francisco Javier Fernández, que se dejó ver en la concentración muy cerca de los tres ediles del PSOE que asistieron (Hurtado, Zafra y Luna) y de los dos del PP (Bellido y Jaén).
Pero ningún nombre propio protagonizó la manifestación, porque alguien le había asignado ya el papel estelar a la razón. «Encima tenemos que escuchar decir a Arenal 2000 que con 120.000 euros va a dejar la zona talada mejor de lo que estaba: eso es insultar a nuestra inteligencia», decía un vecino de camino al Arroyo del Molino, al que apenas acudieron dos docenas de manifestantes. Allí, en medio de troncos cercenados y monte bajo abierto en canal, la sabiduría herida de la naturaleza apenas se abría paso entre la arrogancia devastadora del poder.
Rafael A. Aguilar
Fuente:ABC