El Ayuntamiento protegerá el espacio natural de los Baños de Popea, que será gestionado como zona verde de especial protección, según recordó ayer el presidente de la Gerencia Municipal de Urbanismo, Andrés Ocaña.
El edil salió así al paso de la protesta que la denominada Plataforma Salvemos los Baños de Popea llevó a cabo el sábado ante la Caseta Municipal. Ocaña insistió en que el plan parcial Trassierra II estuvo ocho años en exposición pública, fue aprobado por unanimidad y cuenta con el visto bueno de la Junta y los informes favorables de la Consejería de Medio Ambiente. En el Ayuntamiento, aún queda un periodo de alegaciones antes de la aprobación definitiva. Por eso, el edil no entiende las protestas, que achaca a que detrás está la mano de los "amigos de los verdes", en referencia al PSOE.
El Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) establece nuevas zonas residenciales en la Sierra, como la urbanización de 233 chales que proyecta Arenal 200 y contra la que protestaba la plataforma, pero en ningún caso afectaría a los Baños de Popea, asegura Ocaña.