La concentración coincidió con una protesta ecologista contra un proyecto de la empresa
Más de mil empleados de uno de los principales constructores de Córdoba, Rafael Gómez, se manifestaron ayer en defensa de su jefe, quien, según aseguran el PSOE y Los Verdes, recibe un trato de favor del Ayuntamiento de la capital, gobernado por Rosa Aguilar (IU). La manifestación se produjo en la sede de Arenal 2000, la principal empresa del grupo de Rafael Gómez. Esta concentración coincidió con una protesta, en las puertas la constructora, de un centenar de ecologistas. Éstos se oponen a la decisión del Ayuntamiento de aprobar un plan que permite a Gómez construir 233 viviendas en la sierra. "Hay gente que quiere ver destruida" la empresa, afirmó Gómez.
"Basta ya" gritaban ayer a un lado y otro de la verja de la sede de Arenal 2000. Dentro de las instalaciones, más de mil empleados del grupo y sus familiares coreaban el "basta ya" para reclamar que cesen las críticas a su jefe, Rafael Gómez. Fuera, un centenar de ecologistas de la Plataforma Salvemos Los Baños de Popea también gritaba "basta ya", en este caso para pedir que se frenen las "agresiones" a la sierra cordobesa.