En la marcha de mayo de 2011 nos reunimos menos personas de lo habitual solo unas 20, probablemente por ser puente y la acumulación de eventos, Cruces, manifestaciones, etc...
Podéis bajaros el track con nuestro gestor
Pero tuvimos la suerte de que nos hizo un buen día y pudimos de nuevo hacer un recorrido por caminos por los que difícilmente nos permitirían ir solos.
Por primera vez usamos el autobús de AUCORSA para desplazarnos, para ahorrar contaminación y en previsión de que no hubiera suficientes coches. Así que en el autobús N subimos hasta bajarnos en la parada del Frenazo.
Poco más adelante en la carretera en la curva sale una vereda que nos lleva a Cañada Real Soriana. Caminamos por ella en un tramo.
Pasamos por esta placa que recuerda a alguien de la Asociación del Camino de Santiago
Llegamos de nuevo junto a la carretera, y aquí hay que buscar una vereda que nos baja a la vía del tren
Estamos junto al túnel del tren, en este tramo la Vereda de la Armenta coincide con la vía del tren.
Caminamos en dirección opuesta al túnel, hasta llegar a un lugar donde hay restos de un paso. Allí tomamos un sendero que es la continuación de la Vereda de la Armenta. Esta vereda se deslindó hace unos tres años, y en este tramo está preciosa y transitable.
Cruzamos un arroyo y caminamos junto a él
Tras una buena subida nos encontramos en el cruce entre la vía del tren, el camino de la Armenta y la Vereda de la Armenta.
Tomamos el Camino de la Armenta. Camino público que aparece en toda la cartografía histórica, y que los propietarios rechazan reconocer. El ayuntamiento por su parte nada ha hecho para recuperarlo.
Aparecen los guardas. Tras un intercambio de impresionamos, con un tono cordial, continuamos. Al menos parece que en estos 9 años hemos conseguido un cambio de actitud y, aunque no reconocen que el camino es público, no impiden que los utilicemos.
Grandes vistas tiene este camino.
La primavera llena todos los prados de flores.
La casa de la Armenta Baja. Antiguamente era la Zahurda de la Armenta. Está claro que ya ese nombre no sería apropiado.
Aquí tomamos la Vereda de la Alcaidía, deslindaden este tramo hace dos años, pero que en su mayor parte se encuentra casi intransitable. Nos vemos andando por un maizal que nos llega a la cintura.
Al cruzar con el carril (que no coincide con la vereda) el resto de la gente sigue por el carril, ya que la vereda se estaba complicando mucho. Yo sigo por donde va el deslinde. Un tramo sigue muy mal, pero tras volver a contactar con el carril, ya mejora y se convierte en una senda bastante agradable.
Vemos de nuevo a lo lejos la Casa de la Armenta Baja.
Salimos de la finca La Armenta, y estamos en el tramo que se deslindó anteriormente de la Vereda de la Alcaidía, que se encuentra amojonado, aunque me parece que muchos mojones se han perdido. A partir de aquí estamos rodeados de vacas durante muchos kilómetros.
Tras comer junto al Cortijo de la Alcaidía, emprendemos el descenso por ella.
Al llegar al cruce entre la Vereda de la Alcaidía y la de Linares nos dividimos: una parte se van directamente para Córdoba, por la Vereda de la Alcaidía, y otra parte seguimos por la Vereda de Linares, buscando tomar el autobús en la urbanización Doña Manuela.
Este tramo de la Vereda de Linares nunca lo había recorrido A Desalambrar, y es bien bonito. Cruzamos por esta cancela (la de la derecha de las dos que hay).
Pantano que se ha formado en unas antiguas canteras. Parece ser que le llaman el Lago Azul.
El Cortijo de Navalagrulla.
Tenemos que cruzar el Arroyo Rabanales, que va bastante crecido. No resulta demasiado complicado.
A partir del arroyo el camino está menos claro, tenemos que abandonar el carril, que va en otra dirección, y continuamos al frente.
Y atravesamos otra cancela.
Por un tramo que está poco claro por fin damos vistas a la Ermita de Linares y bajamos al lugar donde se cruza la Vereda de Linares que traemos con la Cañada Real Soriana y la carretera que va al Santuario, junto al Arroyo de la Umbría.
Seguimos ahora una senda en la que coinciden la Vereda de Linares y la Cañada Real Soriana. Vemos esta curiosa casa llamada San Fernando.
Este es el desvío en el que a la izquierda sale la Cañada Real Soriana y a la derecha sigue la Vereda de Linares. A partir de aquí la vereda está bastante perdida, se pone a llover y todo eso hace que nos salgamos de la vereda y nos vayamos a la carretera que han hecho nueva hasta la antigua carretera del Muriano.
Son las 5 y el autobús no pasa hasta las 6 y cuarto, por lo que la mayor parte de nosotros decidimos seguir el camino hasta llegar a Córdoba. Para ello seguimos la carretera hasta llegar a un antiguo apeadero. Allí sale un carril que pasa por debajo de la nueva carretera del Muriano.
Bajando por este carril llegamos al Arroyo Pedroche. El puente que había aquí está destrozado, por lo que ahora sí toca descalzarse.
Algo más arriba hay una cancela, que nos habían dicho que estaba cerrada pero no es así. De todos modos en este camino, que hasta está señalizado por el ayuntamiento, sobran las señales de prohibido el paso.
Continuamos bajando el Arroyo Pedroche, uno de los paseos más encantadores de nuestra sierra.
Fuente de la Trinidad
Acabamos cruzando el Arroyo de Santo Domingo que aquí se une al Pedroche.
Parcela en el propio cauce del arroyo. Cosas inexplicables.
De aquí bajamos a Córdoba pasando por las cercanías de la Urbanización Mirabueno y la ronda que estamos haciendo a Córdoba. Finalmente nos hicimos unos 25 kilómetros, una larga ruta pero preciosa, y al ladito de Córdoba.
Aquí tenéis, en morado, el recorrido de la ruta. Pinchando veis el plano mayor
