En el Libro las Aguas de Córdoba de López Amo figura el Venero de la Huerta del Naranjo con la siguiente descripción:
Este se halla contiguo a expresada huerta en el Arroyo de las Piedras, con dirección al norte, saliendo su ramo y dirigiéndose por el arroyo abajo por la margen del mismo, hasta introducirse en el depósito titulado Sombrero del Rey y con el número de seis pajas, agregándosele otro con cuatro pajas que van a unas cien varas del depósito.
En la memoria de Luis Cid figura destinado a uso público y abrevadero con un caudal de 1,1 litros por minuto. Lo describe así:
Situado en las inmediaciones de la huerta de este nombre. Es un arca aisalada donde solo en invierno al abundar las aguas rebasa el nivel utilizándose para el consumo público mediante el acarreo y para abrevar ganado extrayéndola a brazo. Dio en el aforo un litro y un decilitro por minuto y se halla a 2.800 metros de Córdoba y 11 de altura sobre la misma.
En la memoria de Melllada e Iznardi (1912) se describe así:
Naranjo. En la huerta de este nombre hay dos alumbramientos: uno por un pozo con su galería, situado a 20 metros a la izquierda del Arroyo de las Piedras, y otro más profundo y más escaso, abierto junto a la casa. En verano el caudal de ambos es sumamente escaso, por no decir insignficante.
En la tesis de Guadalupe Pizarro se aclara más sobre este nacimiento:
En el segundo cuarto del s. XVII, el caudal de Hoja - Maimón era a todas luces insuficiente para las necesidades que presentaba la ciudad. A pesar de la crisis económica que acuciaba a las arcas municipales, se decidió acometer las obras necesarias para que no faltase el agua en las fuentes públicas. Así, los documentos de archivo afirman que “aunque los Ventiquatros antiguos trajeron el agua de ojamaimon, y experimentando no era bastante para mantener sus fuentes, compro esta ciudad la que llaman de la
Guerta del Naranjo, y aviendolas juntado ambas también vieron no era bastante para estar mantener sus fuentes y así compro la de Torquemada como todo se reconocería de los libros capitulares de zinquenta y quatro”.
El texto es claro: antes de 1654 ya se habían construido dos conducciones que unían sus aguas al Nacimiento de Hoja Maimón. Ambas desembocaban en un arca del tipo “sombrero del rey”, la que se conserva in situ junto a las instalaciones de SADECO de la c/ Acera de la Fuente de la Salud.
El ramal procedente de la Huerta del Naranjo, nacía junto al Arroyo de las Peñas o de las Piedras, donde había un arca de captación. Desde aquí partiría una cañería que discurría en paralelo a dicho arroyo, por su margen derecha, hasta llegar al “sombrero del rey”, donde vertía su caudal.
F. Gamero en su tesis se refiere a estas aguas:
"Para el manantial de las Aguas de la Huerta del Naranjo lo poco que aporta LÓPEZ AMO (1997) es que se inicia junto al curso del arroyo de las Piedras en la barriada de El Naranjo, baja junto a la margen norte del arroyo aportando unas seis pajas en la alcubilla anteriormente denominada Sombrero del Rey, en la actual avenida Acera de Fuente de la Salud. También señala que a unas 100 varas de esta alcubilla llegaba otro manantial con cuatro pajas que nosotros identificamos como el de Torquemada.
El texto “Estracto de noticias de las Aguas que esta M N y M L ciudad tiene para el abasto común” (caja 281 el expediente 29, página dos) reseña ya de la existencia de estas aguas en el año de 1654 así como su ubicación aproximada. Seguramente este autor (LOPEZ AMO, 1997) tomó estas referencias al describir estos dos manantiales. Por la prensa histórica del 10 de febrero de 1917 del Diario Córdoba sabemos que se llevó el ramal de estas Aguas del Naranjo hasta la Puerta del Colodro. También por la prensa de 17 de septiembre de 1930 conocemos de la solicitud de la instalación de una fuente frente a la Huerta del Naranjo. Tenemos constancia de un registro con
gran salida de agua en la casa nº 23 de la actual calle Madres Escolapias, la cual asociamos con una alcubilla del manantial de esta Huerta del Naranjo."
En el plano catastral de 1950 aparece una alberca y una noria en la Huerta del Naranjo, de las que aún quedan restos integrados en el Parque de la Asomadilla. También aparece algo que puede ser un pozo junto a la casa.
La alberca y noria puede estar relacionada con el primer venero de los descritos por Mellada e Iznardi, y el pozo junto a la casa con el segundo. Los terrenos donde estaría este último ahora corresponden a un chalé.
Hay un artículo en Notas Cordobesas sobre la noria y alcubilla.
Alberca en Huerta del Naranjo (Asomadilla). Foto: Notas Cordobesas