El teniente de alcalde de Urbanismo, Andrés Ocaña, dio ayer por sentado que se aplicará una sanción a la empresa Arenal 2000 dadas las evidencias de la irregularidad con la que se actuó en el terreno protegido del arroyo del Molino, que llevó a la Gerencia de Urbanismo a dictar una orden de paralización de actividad y dado el "daño contra el patrimonio natural" ocasionado y la calificación del terreno como suelo de especial protección. Ocaña anunció que, como dictan las normas, se exigirá la restitución urbanística de los daños ocasionados, además del importe proporcional en función a lo dispuesto en la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía.

 

Por su parte, CCOO difundió un escrito apoyando a la Gerencia de Urbanismo en sus acciones contra Arenal 2000, reclamando a todas las administraciones rigor en casos similares y para que se faculte a los agentes forestales para paralizar acciones como la ocurrida si consideran que son irregulares.

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